Valledupar, ciudad en constante crecimiento, lugar donde se realizan eventos de magna importancia, cómo el festival de la Leyenda Vallenata, competencias deportivas, espectáculos y actividades recreativas, mismos que congregan a propios y foráneos cada año en esta hermosa ciudad del caribe.
Teniendo claro que como ciudad somos el centro de muchas actividades, la Gestión del riesgo de Desastres debe dar la talla con norma, calidad y experiencia de modo tal que el proceso social enmarcado en la ley 1523 de 2012 se aplique taxativamente para cumplir el objeto de su creación como ley de la República, proteger las vidas de los personas, sus bienes y el medio ambiente que les rodea.
Analizamos con preocupación, que quienes son responsables de hacer que los requisitos que la norma dicta sean cumplidos a cabalidad, omiten convocar a las instituciones miembros de una comisión técnica (Guía Técnica de Aglomeración de personas UNGRD 2018) quienes cuentan con voz y voto por ser miembros del consejo municipal o departamental de la Gestión del riesgo de Desastres para en conjunto tomar decisiones que beneficien la correcta interpretación y aplicación de la ley en la realización de eventos públicos donde se congregan seres humanos.
Citaré dos ejemplos de esto, Juegos Bolivarianos, realizados el año anterior dónde si verificamos los registros y dada la magnitud del evento, no se dio participación a todos los organismos de socorro que funcionan en Valledupar, quienes han sido reconocidos cómo miembros del subsistema del voluntariado de primera respuesta, previa experiencia y cumplimiento de requisitos en capacitación equipamiento y experiencia por la ley 1505 de 2012.
Otro ejemplo, fue el evento de las válidas de motocicleta desarrolladas en las calles de la ciudad, dónde tampoco asistieron porque no fueron convocados, aunque este es un requisito normativo para poder llevar a cabo estos eventos, en su lugar se le da espacio a empresas privadas que suplen servicios de salud complementarios pero que no están reconocidos cómo miembros del subsistema del voluntariado de primera respuesta porque no cuentan con la experiencia ni la integralidad en la capacitación y entrenamiento en la atención de distintas emergencias, y peor aún, no han cumplido el proceso para recibir el reconocimiento cómo miembros del subsistema del voluntariado de acuerdo a lo que menciona la ley 1505. Podríamos encontrar muchos ejemplos más de eventos que se llevan a cabo y no cumplen con los mínimos requisitos que garanticen la seguridad de la comunidad Valduparenses y de sus visitantes.
El decreto ley 1523 de 2012 fue creada e impartida para cumplimiento y aplicación en cada rincón del territorio nacional, entonces la pregunta que surge es: ¿Porqué se favorece por encima de las instituciones de Socorro a empresas privadas?, que obviamente pueden complementar con sus servicios pero no suplir la participación de organismos experimentados, mismos que tienen gran aceptación en la comunidad porque han Sido ellos quienes han estado atendiendo emergencias como El terremoto de Armenia, la Avenida Torrencial de Mocoa, El Huracán Iota y un innumerable de hechos de origen socio-natural o antropogénicos acaecidos en Colombia durante muchos años.
Estamos a tiempo! Prevenir que eventos como la válida del día domingo en Valledupar tengan las medidas necesarias y la atención de calidad requerida, lo vimos en los diferentes vídeos e imágenes que circularon por redes Sociales.