Con la voz entrecortada, llena de alegría y un poco de nostalgia, por una vejez marcada por el abandono, María del Carmen Navarro Jaimes, una adulta mayor del barrio La Victoria, disfrutó de una jornada más de cuidado y bienestar, realizada por la Alcaldía de Valledupar.
A su avanzada edad, María del Carmen encontró en este evento el espacio adecuado de atención y cuidado que tanto necesita. “Yo soy una de las adultas mayores golpeada por el abandono, pero me siento feliz, porque estas actividades me han dado calidad de vida porque las disfrutamos y nos sentimos más felices y acompañados”, aseguró.
Durante la jornada realizada a través del Plan de Intervenciones Colectivas, operado por el Hospital Eduardo Arrendó Daza, Secretaría Local de Salud y la iniciativa Años de Cuidado, de la Oficina de Gestión Social, se beneficiaron 336 adultos mayores de la comuna 4 con la implementación de una brigada integral de salud física, mental y psicosocial, para promover la calidad de vida de esta población.
El presidente de los Adultos Mayores de Valledupar, José Francisco Benítez, reconoció la importancia de realizar estos eventos, pues son muchas las necesidades que tiene esta población. “No habíamos tenido la oportunidad de conocer una programación integral que venga de la Administración Municipal; con el alcalde Ernesto Orozco sentimos que somos prioridad para la Alcaldía de Valledupar”.
La brigada ofreció una serie de servicios para mejorar el bienestar de los asistentes, entre los que se encontraron atención en salud oral, tamizaje cardiovascular, información sobre la ruta de violencia y hábitos saludables, vacunación, centro de escucha de salud mental, espacios lúdico formativos sobre prevención del dengue, medicina general y cuidado personal.
Este esfuerzo por parte de la Alcaldía de Valledupar, junto con las organizaciones que hicieron acompañamiento, como Sisbén, Inder, Policía Comunitaria, Ejército Nacional y la Universidad Popular del Cesar, reafirma el compromiso con el bienestar de los adultos mayores, ofreciendo no solo atención médica, sino también apoyo emocional y social. Una jornada de cuidado integral que, sin duda, dejó una huella de esperanza y satisfacción en el corazón de esta población de la capital del Cesar.