CREER en alianza con la Cámara de Comercio de Valledupar y la Caja de Compensación Familiar del Cesar (COMFACESAR), lideró el Encuentro Cesar 2040, el que reunió organizaciones nacionales e internacionales para reflexionar sobre los desafíos del departamento de cara a los efectos de la descarbonización.
“Queremos visibilizar las transformaciones que ya están ocurriendo y continuarán por muchos
años, y facilitar un diálogo incluyente y constructivo sobre desarrollo territorial”, manifestó Luis
Fernando de Angulo, Director del Centro Regional de Empresas y Emprendimientos
Responsables (CREER).
Una de las experiencias compartidas en el encuentro, fue la del cierre de las minas de carbón en Holanda en los años 70, lo que permitió concluir que hay que pensar desde ya, en el largo plazo porque la dimensión de los impactos requiere una movilización importante de recursos y tener metas comunes que convoquen a todos los actores.
Pierre Huppert, consultor de The Terrace, contó la situación de la región de Limburg, en la que su padre fue trabajador ff minero. “Fue esencial contar con el plan de desarrollo y reestructuración, en la que se invirtieron 5 mil millones de Euros. Aunque no se puede mitigar todo, los impactos negativos se reducen cuando hay un liderazgo del Estado y se logra un proceso participativo y duradero”.
Todos deben contribuir; empresas mineras y de otros sectores, líderes comunitarios, sindicatos, autoridades locales y gobierno nacional tendrán que asumir compromisos claros y verificables en torno a objetivos económicos, sociales y ambientales. Y, a propósito de esto, John Morrison (Director de IHRB) se refirió a un tema del que poco se habla en los diálogos globales – como la COP 26- y nacionales sobre descarbonización: la corresponsabilidad de gestionar los impactos en territorios como el Cesar por parte de aquellos países que se beneficiaron de la oferta de carbón por más de dos siglos.
El Director Administrativo de Comfacesar, Frank Montero, expresó que para el caso de la Caja, el sector minero es muy importante, debido a que el 93% de los recursos que este aporta se compensa a los trabajadores de otros sectores de la economía que son de menores ingresos.
“Un sector como este, en un departamento como el nuestro mueve casi toda la cadena; si debemos prepararnos para una reconversión, pero mientras se da una época post carbón, debemos desarrollarnos como hicieron otros países como Holanda, Alemania o Europa, los cuales toda la vida se dedicaron a la extracción, se desarrollaron y ahora están utilizando otro tipo de energías. Nosotros mientras nos llega ese desarrollo, lo que tenemos es que aprovechar las regalías, administrarlas bien, optimizar esos recursos y en eso nosotros estamos prestos a ayudar siempre”.
En este mismo sentido, Diego Dorado, ex subdirector del Departamento Nacional de Planeación invitó a los municipios mineros a “trabajar articuladamente en un plan de choque con visión de largo plazo, que genere empleo e impulse sectores como el agrícola, el turismo y las energías”. Esto debe acompañarse de un “fondo de estabilización, estructuración de proyectos y de una institucionalidad independiente de los ciclos electorales”, agregó.