La vacunación en nuestro país, y en especial nuestra región, marca un derrotero que nos debe guiar por el camino de la confianza.
La confianza y optimismo para iniciar la etapa más difícil pero necesaria, que es reactivar todos los niveles de la sociedad para impulsar los sectores de la economía.
Sectores golpeados durante marzo de 2020, el desbordado aumento del desempleo; afecto muchos hogares cesarences, su ingenio les permitió sostenerse el día a día creando e innovando en la manera de ganarse la vida.
Aportando esto a la economía deprimida pequeños impulsos que les permitieron subsistir durante muchos meses.
Hoy el escenario nos permite ver un futuro que requiere de la participación de todos ya que depende de muchos factores el poder lograr equilibrar; la nueva etapa de vida que nos espera.
Mientras, esperamos el turno asignado para recibir la dosis de vida, debemos aportar con el autocuidado y con acciones direccionadas a crear sostenibilidad en el tiempo en nuestro entorno, con el fin de generar un ejemplo mas a los demás.
Es indispensable y de carácter urgente que desde la altas esferas del Gobierno Nacional se brinden herramientas a los territorio para impulsar políticas publicas; esto permitirá fortalecer elementos fundamentales para el Cesar, como la ganadería, las diferentes despensas agrícolas que tenemos y la seguridad en la zona rural y cabeceras municipales.
El golpe recibido por el anuncio de Prodeco de abandonar la explotación de carbón, genera una visión en el gobierno departamental; fortalecer las líneas anteriormente mencionadas. Llego el momento de mirar definitivamente al campo, es nuestra mayor fortaleza y apoyarlo seria garantizar la seguridad alimentaria a varias generaciones.
Hoy día existen políticas publicas que muestran con optimismo la posible reactivación económica, la construcción de vías de acceso a los pequeños, medianos y grandes productores.
Actualmente se están implementando estrategias desde el gobierno nacional y departamental que permiten pensar en lograr inversiones importantes en sistemas de producción agropecuarias, avícolas, piscícolas, pesqueras y de igual manera el fortalecimiento del turismo y en nuestra región existen paisajes de naturaleza única en el mundo, que respetando el entorno y conservando los recursos naturales podemos convertirlos en un lugar apetecido por muchos turistas que vendrían a admirar la creación de Dios reflejada en nuestras tierras.
Por ultimo, en días pasados recibimos la noticia que en nuestra Sierra Nevada de Santa Marta, se extrajo la primera tonelada de algodón orgánico, alianza entre Algodón Colombia y Fundación Prosierra, que servirá de insumo para para empresas de ropa en Colombia, esto es muestra de todo el potencial que tenemos y hemos masificado.
Dentro del proyecto se vínculo a nuestras comunidades indígenas Arhuacos, Wiwa y kogui.
La pandemia nos hizo una invitación a muchas reuniones con distanciamiento, pero la principal fue reconciliarnos con el entorno natural, respetar la diferentes especies y procurar ser mejores seres humanos.
Por. Nicolás Mohrez Muvdi
