EL primer caso se registró en el Batallón de Alta Montaña N° 7 en el municipio de Codazzi (Serranía del Perijá) en el departamento del Cesar.
El soldado Yimmi Uriana se quitó la vida, propinándose un disparo mientras prestaba su turno de guardia.
Uriana era natural de Manaure Guajira y pertenecía a la etnia Wayuu.
El segundo caso se registró en el Batallón La Popa en el municipio de Valledupar, donde un soldado regular se quitó la vida mientras prestaba su turno de guardia.
Estos dos casos están en manos de las autoridades, quienes adelantan las investigaciones pertinentes para determinar las causas que llevaron a estos militares a quitarse la vida.
Así mismo la Justicia Penal Militar dará inicio a la investigación interna y disciplinaria que corresponda sobre estos casos.